martes, 22 de mayo de 2012

mambo de la realeza

A Vos, que nunca vas a escuchar esto de mi boca

Conocí a mi príncipe azul, me di cuenta que era él mucho tiempo más tarde: cuando ya no lo veía y él ya había encontrado a la dueña del zapato.
Tengo todos los síntomas de la gente que se siente enamorada, y es así como me convierto en la estúpida más grande: me río de todo, me sorprende todo lo que dice, me quedo idiotizada mirando sus gestos cuando no me mira y cuando lo hace, bajo la mirada a esa servilleta insignificante que estoy apretando entre las uñas y me hace doler.
Bailamos y me acuerdo que fue en ese primer baile en que te convertiste en mi príncipe. Eras frágil, debilucho, sensible, hasta que bailamos y mi cintura sintió que eras un hombre, que sabés adonde vas y donde querés que yo vaya. Envolviste tu cuello con mi mano y tu mano saludó a mi cadera y se quedaron charlando. Tu perfume quedó en mi mano.
Quise mirarte, pero vi que me mirabas fijo y no pude. Tus ojos me traspasan y me matan. Y si me estás agarrando la mano y no dejo de sentir que me estoy por desmayar, que me robás toda la cordura, la coherencia, el frío, el nombre.
Quiero que esa burbuja que se forma entre nosotros sea real y naranja y espesa.
Tengo muchas preguntas para hacerte, te quiero saber, ¿a qué sabrás? A algo rico seguro.
Tenés misterio porque sabés lo que mostrás, sabés lo que se ve, se nota que te miraste mucho al espejo.Yo me miraría todo el tiempo si fuera vos y me acariciaría tanto.
¿Bailamos?



5 comentarios:

  1. Agustin: Me encanto. Era hora de que te pusieras a escribir. Ahora me morfo el resto de tus palabras.

    "sea real y naranja y espesa."

    ResponderEliminar
  2. los que parecen principes azules siempre terminan siendo sapos.....remenber

    ResponderEliminar
  3. bajo la mirada a esa servilleta insignificante que estoy apretando entre las uñas y me hace doler.

    muy buena descripcion!!!

    ResponderEliminar
  4. Hermosura
    Desde ahora sólo quiero saber a qué saben los hombres

    ResponderEliminar